

Salmo 78 Completo y Con Explicación
Introducción al Salmo 78
El Salmo 78 es un "Maskil" o poema didáctico, atribuido a Asaf, uno de los directores de coro establecidos por el rey David. Su tema central es la enseñanza de las futuras generaciones a través de la fiel narración de la historia de Israel, desde el Éxodo hasta el reinado de David. Es un recuento solemne que contrasta la incesante fidelidad de Dios (a pesar de Su ira justa) con la obstinada infidelidad y el olvido de Su pueblo. El salmista utiliza esta epopeya histórica como una advertencia y una instrucción para que la generación actual no repita los errores de sus antepasados, sino que "pongan en Dios su confianza, y no se olviden de las obras de Dios" (v. 7).
Salmo 78 Completo
1.Escucha, pueblo mío, mi ley;
2.Inclinad vuestro oído a las palabras de mi boca.
3.Abriré en parábolas mi boca;
4.Declararé cosas que se guardaron en secreto desde tiempos antiguos;
5.Las cuales hemos oído y entendido;
6.Que nuestros padres nos contaron.
7.No las encubriremos a sus hijos,
8.Contando a la generación venidera las alabanzas de Jehová,
9.Y su potencia, y las maravillas que ha hecho.
10.Él estableció testimonio en Jacob,
11.Y puso ley en Israel,
12.La cual mandó a nuestros padres
13.Que la notificasen a sus hijos;
14.Para que lo sepa la generación venidera, y los hijos que nacerán;
15.Y los que se levantarán lo cuenten a sus hijos;
16.A fin de que pongan en Dios su confianza,
17.Y no se olviden de las obras de Dios,
18.Sino que guarden sus mandamientos;
19.Y no sean como sus padres,
20.Generación contumaz y rebelde;
21.Generación que no dispuso su corazón,
22.Ni fue fiel para con Dios su espíritu.
23.Los hijos de Efraín, arqueros armados,
24.Volvieron las espaldas el día de la batalla.
25.No guardaron el pacto de Dios,
26.Ni quisieron andar en su ley,
27.Sino que se olvidaron de sus obras,
28.Y de sus maravillas que les había mostrado.
29.Delante de sus padres hizo maravillas
30.En la tierra de Egipto, en el campo de Zoán.
31.Dividió el mar y los hizo pasar;
32.Detuvo las aguas como un montón.
33.Les guio de día con nube,
34.Y toda la noche con resplandor de fuego.
35.Hendió las peñas en el desierto,
36.Y les dio a beber como de grandes abismos.
37.Sacó de la peña torrentes,
38.Y hizo descender aguas como ríos.
39.Pero aun así, pecaron aún más contra él,
40.Enojando al Altísimo en el desierto.
41.Pues tentaron a Dios en su corazón,
42.Pidiendo comida a su gusto.
43.Y hablaron contra Dios,
44.Diciendo: ¿Podrá poner mesa en el desierto?
45.He aquí, él golpeó la peña, y brotaron aguas,
46.Y torrentes se desbordaron;
47.¿Podrá dar también pan,
48.O preparar mesa a su pueblo?
49.Oyó Jehová, y se indignó;
50.Se encendió en gran manera fuego contra Jacob,
51.Y subió también su furor contra Israel,
52.Por cuanto no habían creído a Dios,
53.Ni habían confiado en su salvación.
54.Sin embargo, mandó a las nubes de arriba,
55.Y abrió las puertas de los cielos,
56.E hizo llover sobre ellos maná para comer,
57.Y les dio trigo del cielo.
58.Pan de nobles comió el hombre;
59.Les envió comida hasta saciarles.
60.Hizo soplar el viento solano en el cielo,
61.Y trajo con su poder el viento del sur.
62.E hizo llover sobre ellos carne como polvo,
63.Y aves de vuelo como la arena del mar.
64.Las hizo caer en medio del campamento,
65.Alrededor de sus tiendas.
66.Comieron, y se saciaron;
67.Les cumplió, pues, su deseo.
68.No habían quitado de sí su anhelo;
69.Aún estaba la comida en su boca,
70.Cuando vino sobre ellos el furor de Dios,
71.Y mató a los más robustos de ellos,
72.Y derribó a los escogidos de Israel.
73.Con todo esto, volvieron a pecar,
74.Y no creyeron en sus maravillas.
75.Por tanto, consumió sus días en vanidad,
76.Y sus años en turbación.
77.Si él los mataba, entonces buscaban a Dios;
78.Entonces se volvían y se apresuraban a buscar a Dios.
79.Se acordaban de que Dios era su refugio,
80.Y el Dios Altísimo su redentor.
81.Pero le lisonjeaban con su boca,
82.Y con su lengua le mentían;
83.Pues sus corazones no eran rectos con él,
84.Ni estuvieron firmes en su pacto.
85.Pero él, misericordioso, perdonaba la maldad, y no los destruía;
86.Y apartó muchas veces su ira,
87.Y no despertó todo su enojo.
88.Se acordaba de que eran carne,
89.Soplo que va y no vuelve.
90.¡Cuántas veces lo provocaron en el desierto,
91.Y lo enojaron en la soledad!
92.Y volvían, y tentaban a Dios,
93.Y provocaban al Santo de Israel.
94.No se acordaron de su mano,
95.Del día que los redimió de la angustia;
96.Cuando puso en Egipto sus señales,
97.Y sus maravillas en el campo de Zoán;
98.Convirtió en sangre sus ríos,
99.Y sus arroyos, para que no bebiesen.
100.Envió entre ellos enjambres de moscas que los devorasen,
101.Y ranas que los destruyesen.
102.Dio también a la oruga sus frutos,
103.Y sus labores a la langosta.
104.Destruyó con granizo sus viñas,
105.Y sus sicómoros con helada.
106.Entregó al granizo sus bestias,
107.Y a los relámpagos sus ganados.
108.Envió sobre ellos el ardor de su ira,
109.Enojo, indignación y angustia,
110.Un ejército de ángeles destructores.
111.Dispuso camino a su furor;
112.No eximió de la muerte a las almas de ellos,
113.Sino que entregó a la mortandad las vidas de ellos.
114.Hirió a todo primogénito en Egipto,
115.Las primicias de las fuerzas en las tiendas de Cam.
116.Hizo salir a su pueblo como ovejas,
117.Y los llevó por el desierto como un rebaño.
118.Los guio con seguridad, de modo que no tuvieran temor;
119.Y el mar cubrió a sus enemigos.
120.Los trajo después a los límites de su tierra santa,
121.A este monte que ganó su mano derecha.
122.Expulsó a las naciones de delante de ellos;
123.Con cuerdas repartió sus heredades,
124.E hizo habitar en sus tiendas a las tribus de Israel.
125.Pero ellos tentaron y enojaron al Dios Altísimo,
126.Y no guardaron sus testimonios;
127.Sino que se apartaron, y actuaron alevosamente como sus padres;
128.Se torcieron como arco engañoso.
129.Le enojaron con sus lugares altos,
130.Y le provocaron a celo con sus imágenes de talla.
131.Lo oyó Dios, y se enojó,
132.Y en gran manera aborreció a Israel.
133.Dejó, por tanto, el tabernáculo de Silo,
134.La tienda en que habitó entre los hombres,
135.Y entregó al cautiverio su poder,
136.Y su gloria en mano del enemigo.
137.Entregó también su pueblo a la espada,
138.Y se indignó contra su heredad.
139.El fuego devoró a sus jóvenes,
140.Y sus vírgenes no fueron alabadas en cantos nupciales.
141.Sus sacerdotes cayeron a filo de espada,
142.Y sus viudas no hicieron lamentación.
143.Despertó el Señor como quien duerme,
144.Como un gigante que grita excitado del vino.
145.Hirió a sus enemigos por detrás;
146.Les dio perpetua afrenta.
147.Desechó la tienda de José,
148.Y no escogió la tribu de Efraín,
149.Sino que escogió la tribu de Judá,
150.El monte de Sion, al cual amó.
151.Edificó su santuario a manera de eminencia,
152.Como la tierra que cimentó para siempre.
153.Escogió a David su siervo,
154.Y lo tomó de las majadas de las ovejas;
155.De detrás de las paridas lo trajo,
156.Para que apacentase a Jacob su pueblo,
157.Y a Israel su heredad.
158.Y los apacentó conforme a la integridad de su corazón;
159.Los guio con la pericia de sus manos.
Explicación del Salmo 78
Este salmo se divide en varias secciones, funcionando como una lección magistral de historia teológica. I. El Propósito de la Enseñanza (v. 1-8): Asaf exhorta al pueblo a escuchar la ley, la cual debe ser transmitida fielmente de generación en generación. La meta no es solo conocimiento, sino evitar el pecado de sus antepasados, quienes fueron "generación contumaz y rebelde" (v. 8). La desobediencia histórica de Israel se arraiga en no disponer el corazón para ser fiel a Dios. II. La Infidelidad de Efraín y las Quejas en el Desierto (v. 9-39): El salmo menciona específicamente a Efraín (v. 9), la tribu dominante en el norte, como ejemplo de fracaso, pues, a pesar de estar armados, se rindieron ante el enemigo. Este es un preludio a la mayor infidelidad en el desierto. El pueblo "tentó a Dios en su corazón, pidiendo comida a su gusto" (v. 18). Aunque Dios proveyó milagrosamente el maná y el agua (v. 24-31), la fe de ellos fue superficial. Cuando Dios los castigaba, se arrepentían momentáneamente y buscaban a Dios, pero su arrepentimiento era falso, pues "sus corazones no eran rectos con él, Ni estuvieron firmes en su pacto" (v. 37). Sin embargo, la misericordia de Dios prevalecía, recordando que ellos solo eran "carne, Soplo que va y no vuelve" (v. 39). III. Los Milagros en Egipto y el Éxodo (v. 40-53): Para recalcar lo inexcusable de su ingratitud, Asaf relata las diez plagas (v. 44-51), culminando en la muerte de los primogénitos egipcios, y el milagro del Éxodo (v. 52-53). La liberación fue un acto de poder absoluto que Israel, una y otra vez, se negó a recordar, volviendo a provocar a Dios. IV. El Asentamiento y la Caída de Silo (v. 54-64): Después de ser guiados a la Tierra Prometida, Israel cayó en la idolatría, provocando el celo de Dios. El punto culminante de la ira divina fue el abandono del Tabernáculo en Silo (v. 60), que en ese tiempo era el centro de culto en el territorio de Efraín, y la entrega del Arca del Pacto a los filisteos (una referencia al tiempo de Elí y Samuel), resultando en la muerte de sacerdotes y jóvenes. V. El Despertar de Dios y la Elección de David (v. 65-72): Dios, descrito como "un gigante que grita excitado del vino" (v. 65, despertando de su aparente inacción), finalmente actúa. Él rechaza formalmente a Efraín (el norte) y escoge a Judá, el Monte Sion, y a David como pastor de Su pueblo. La conclusión es un encomio a David, cuya integridad de corazón y pericia de manos contrastan con la rebelión de las generaciones anteriores, mostrando que el verdadero liderazgo se basa en la fidelidad al pacto divino.
Reflexión del Salmo 78
El Salmo 78 nos recuerda que la incredulidad no es primariamente una falta de evidencia, sino una falla de la memoria espiritual. En la vida moderna, somos propensos a repetir los errores de Israel: olvidar las "maravillas" que Dios ha obrado, ya sea en la historia bíblica (la cruz y la resurrección) o en nuestra propia vida personal. Cuando enfrentamos dificultades o deseos no cumplidos, ¿tendemos a "tentar a Dios en nuestro corazón" (v. 18), cuestionando si Él es capaz de proveer o si Su camino es el mejor? Este salmo nos llama a la obediencia arraigada. No basta con la "lisonja de boca" (v. 36) o el arrepentimiento momentáneo que solo busca alivio del castigo. La verdadera fidelidad, como la que Dios buscó en David, requiere un corazón íntegro y una pericia espiritual constante, alimentada por el recuerdo de Su inmutable misericordia. Debemos contar las maravillas de Dios a la próxima generación, no como una mera historia, sino como una advertencia vital: el juicio es real, pero la paciencia de Dios es eterna, siempre buscando redimir a Su pueblo.
Oración Basada en el Salmo 78
Oh, Dios, Altísimo y Redentor nuestro, te rogamos que inclines nuestros oídos a la ley de tu Palabra, tal como Asaf rogó a Israel. Con humildad, reconocemos que nuestro corazón es propenso a la contumacia y a la rebelión, olvidando las grandes maravillas de tu salvación y tentándote con nuestras dudas y quejas. Perdónanos por la superficialidad de nuestra fe y por el arrepentimiento fugaz. Graba en nuestra memoria las señales de tu poder, desde el gran Éxodo de la antigüedad hasta la obra redentora de Cristo en la Cruz, nuestro verdadero pan del cielo y agua viva. Ayúdanos, Señor, a no ser como nuestros padres, que con "lengua le mentían". Danos un espíritu firme y un corazón íntegro, para que podamos apacentar a la generación venidera con fidelidad y pericia, contando tus alabanzas y cimentando nuestra confianza solo en Ti. Amén.



